Tres frases sobre el mundo actoral que tienen que dejar de existir

Este artículo será un tanto distinto, pues hablaremos de un tema que no forma parte de la ficción de alguna obra o película, sino que es el pan de cada día de aquellos que nos dedicamos a la actuación (o a cualquier disciplina artística) y que seguramente tú, a pesar de que no seas actor o actriz, reconoces, pues podría apostar que en algún momento has llegado a escuchar, hacer o decir alguno de estos juicios que estoy por contarte acerca de esta profesión.

1. “Es un mundo de perversión y un ambiente peligroso”

Podría jurar que esta es la más famosa de todas, pues es también el pretexto que los padres le ponen a sus hijxs después del “te vas a morir de hambre” para no dejarles estudiar actuación y no los culpo (tanto), pues en parte es cierto pero, ¿es verdad que es ésta la carrera con el ambiente más peligroso? La respuesta es no.

La diferencia entre el mundo del entretenimiento y cualquier otra profesión es que aquellxs que nos dedicamos al arte siempre estaremos bajo el reflector y el ojo público, por lo que cualquier pequeña situación se vuelve un escándalo conformado 20% por lo que en realidad sucedió y 80% por el saborcito que le agregan los medios al inventar y suponer cosas que jamás sucedieron para poder vender más revistas o tener más vistas en sus plataformas, lo cual hace pensar al mundo en general que se cometen y viven atrocidades al dedicarse a la actuación, sin embargo, seamos honestos: en el mundo de las leyes, el empresarial o el político se viven y escuchan cosas igual o peores, la única diferencia es que si se trata del mundo artístico, se hace viral por culpa de los medios y de nosotros al consumir ese contenido (y es que, ¿a quién no le gusta un buen chismecito?)

2. “A ver, llora”

Si tuviera un peso por cada vez que me han dicho esta frase… probablemente estaría escribiendo esto desde una bahía en Bora Bora con una piña colada en la mano. Y no me mal entiendan, por supuesto que es parte del trabajo de un actor poder derramar lágrimas si así lo exige la escena, la dirección o el personaje, pero por alguna razón a las personas les suele dar un impulso extraño al enterarse de que eres actriz o actor que los hace decir inmediatamente “a ver, llora”.

La realidad es que detrás de una acción como llorar hay un profundo análisis y práctica del personaje y de la situación en la que se encuentra, además de un gran trabajo empático en el que el actor o actriz le prestan estas emociones y su cuerpo al personaje, todo con el fin de transmitir, de contar historias, de llegar al público. Además, a pesar de no ser pan comido, llorar no se encuentra entre las tareas más difíciles del actor y es muchas veces solo lo que se encuentra naturalmente con el trabajo de análisis y representación del personaje, pero muy rara vez es el objetivo o el máximo logro.

Ahora, por supuesto que la mayoría podemos simplemente soltar un par de lágrimas por jugar, practicar y por la anécdota, pero ningunx de nosotrxs es precisamente fanático de que se valore o califique nuestro trabajo o talento por la capacidad de hacerlo.

3. “¿Has salido en novelas o estado en musicales?”

Esta es definitivamente mi menos favorita, porque no solo excluye todas las demás disciplinas y medios en los que se puede desenvolver una actriz o actor, sino que deja ver el hecho de que en México la distribución de la cultura y proyectos artísticos es prácticamente tan real como Santa Claus y por ende, el interés del público, limitado. Tanto que cuando saben que te dedicas a la actuación te encasillan en los dos productos artísticos que más se consumen en el país: las novelas y los musicales. Y es ahí cuando viene la pregunta de a cuál de las dos nos dedicamos, cuando existe el teatro narrativo o convencional, el documento, el político, el performance, el happening, el cine de arte, los cortometrajes y un sinfín de ramas y tipos de maneras en las que nos podemos desenvolver lxs que nos dedicamos a la actuación y que, seguramente, serían de mucho mayor agrado para muchas personas que no están al tanto de todas las maneras en las que se puede disfrutar el trabajo actoral.

Así que ya lo sabes, estos son probablemente los tres juicios acerca de nuestra profesión que más nos ponen los pelos de punta. Siéntete libre de consultarlo con tus amigxs actores y actrices y de reírte un rato con las maravillosas anécdotas que tenemos de las mil y una frases que escuchamos al compartir a qué nos dedicamos.

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