Noche de Fuego, una empática pero cruda mirada a la realidad de muchas mujeres en México

Hace aproximadamente una semana, vi el siguiente tweet citado de Guillermo del Toro:

Y ya saben lo que eso significa: película que él recomiende, película que TIENES que ver. Y así sucedió. Prayers for the Stolen o Noche de Fuego -película que fue selección oficial de la categoría Una Cierta Mirada del festival de Cannes- relata la realidad que viven muchas mujeres en México y la historia ficcional de tres niñas que crecen en una sierra del país en la Comunidad de San Miguel, la cual es atormentada constantemente por la guerra contra y entre el narcotráfico, donde los mismos cárteles se aprovechan de la precariedad económica en la que viven las personas de esta comunidad para pagarles una miseria de dinero por una jornada entera de cosechar lo que ellos trafican.

En una realidad en la que parece la mayor de las condenas vivir entre esa violencia, se le suman los tantos problemas que se desencadenan, tales como que la única escuela de la comunidad cierre de manera constante puesto que pocos profesores se atreven a enseñar en estos lugares y a aquellos que son lo suficientemente valientes muchas veces se les niega el apoyo para hacerlo, la explotación, la migración, el reclutamiento de jóvenes para formar parte de los cárteles y, el tema principal, la violencia de género.

Tatiana Huezo, la directora, hace tan excelente trabajo retratando esta situación, que a través de la vida cotidiana de estas personas puedes sentir el dolor de cada acción a la que se tiene que acostumbrar la gente que la vive, desde cortar el cabello a las mujeres desde que son niñas para que el narco las confunda con varones y no las secuestren, hasta incorporarse después de una balacera afuera de un salón de belleza y seguir escogiendo el color del que quieres que te pinten las uñas como si nada hubiera pasado. Todas estas cosas que para ellos, a pesar de que no son gratas, ya son cosa de su día a día, se van apilando en la sensación de angustia e impotencia de nosotros los espectadores de tal manera que cualquier cambio de escena te tiene al filo de tu asiento (o cama si es que la ves en Netflix) esperando a que pase alguna tragedia.

“La película no es aleccionadora, sino empática” dijo Mayra Batalla (una de las protagonistas del filme) para una entrevista y tiene toda la razón. Todos sabemos la realidad que se vive en México y somos conscientes del peligro que se vive en muchas regiones por esta causa, sin embargo, esta película es una mirada más profunda y específica no al “qué”, sino al “cómo” se vive y eso lo hace aún más desgarrador.

Noche de Fuego, además de haber ganado ya el premio a Mejor Directora en el Festival de Cine de Estocolmo y recibir una ovación de 10 minutos en Cannes, es ya oficialmente la película que representará a México en los siguientes premios Óscar, así que no te la pierdas, apoya el cine mexicano y atrévete a ampliar un poco más tu perspectiva en cuanto a estas problemáticas que nos competen por el simple hecho de ser humanos.