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Cuadernos de patología humana: una mirada íntima al oficio médico

«Saber nombrar la enfermedad es saber tratarla.


En el nombre está el destino.»

En un México donde, a pesar de la falta de plazas para los especialistas nacionales, se contratan médicos cubanos para solventar una crisis equivocada, nace del corazón de un poeta y médico un poemario ganador del XXXIV Premio Internacional de Poesía Fundación Loewe. Mismo poeta que debutó con el libro Epicedio del padre (Premio de Poesía Joven Alejandro Aura). Cuadernos de patología humana (Visor, 2022) es un poemario breve, íntimo y preciso en el que el autor narra su experiencia en el filo de la vida y la muerte.


Orlando Mondragón (México, 1993) describe en su poemario una vivacidad, mortalidad, sus signos, pacientes, estudiantes, cansancio y la vocación e importancia de un médico. Lleno de versos y prosas desgarradoras con metáforas ingeniosas va narrando su día a día en el sistema de salud. Desde guantes, bisturís, jeringas y análisis nos expresa las sensaciones que va viviendo al presentarse distintos casos: partos, muertes, cánceres y demás situaciones que viven esos fríos pasillos de los hospitales.

La estructura es ingeniosa. Cada dos poemas se introduce una prosa poética que habla de las suturas, en especial del color rojo como signo de vida. «En la mayoría de los casos, rojo significa resucitar.» Entre versos libres van las labores del médico, de los enfermeros, de los intendentes, material quirúrgico y el breve espacio de los estudiantes en el hospital. Cada uno arriesga una parte de su vida por la del otro. El médico vive en el límite de la vida y la muerte, los enfermeros la asistencia del enfermo y sus necesidades, los intendentes borrando las manchas de la muerte y del dolor, y los estudiantes viendo los presagios de su destino, estudiantes con la muerte apuntada y abandonada. «Los estudiantes llevan libretas para apuntar la muerte.»

Este libro debería de ser leído por cualquier especialista o aspirante a médico. Se verán reflejados en los versos del poeta y revivirá su vocación. Muy necesitados sentimientos y alivios en medio de una crisis nacional llena de confusiones, deseos, ilusiones, hambre, muerte y desempleo. Incluso debería ser leído por cualquier amante de la poesía y así se puedan sumergir en el mundo de los hospitales y sus guardianes. Un mundo que nos implica a todos.




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