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8 horas subiendo: Visita al Monte Tláloc
La montaña que todavía vive rituales y danzas prehispánicas
Si te gustan las caminatas por el bosque y las subidas de montaña, te recomiendo que visites el Monte Tláloc. Se encuentra en el Estado de México, ya casi en Puebla. Para llegar, lo que hice fue que llegué hasta Río Frío, un pueblo en la carretera camino a Puebla, con el grupo con el que subí.
El recorrido es bastante difícil para llegar hasta la cima, pero vale la pena porque hay un sitio arqueológico muy curioso. Dependiendo del día, encontrarás otros acampantes y personas que aprovechan este lugar tan aislado, elevado y con un aire misterioso para hacer rituales y danzas que están basadas en tradiciones prehispánicas. Esto es bueno pues puedes preguntar a otras personas que van subiendo por dónde es el camino, ya que hay varias bifurcaciones y no hay señalamientos. Esto, además, brinda una cierta seguridad al lugar.
Con descansos prudentes, subir toma unas siete u ocho horas. Es muy recomendable llevar bastones de caminata, pero limitar el peso de la mochila a menos de 10 kilos; de otra manera se vuelve insoportable llevarla. Unos tres sueros o Gatorades son lo que necesitarás para llegar a la cima sin deshidratarte. Un impermeable es vital pues las lloviznas con granizo son frecuentes conforme se llega más alto. Muchos son los espacios planos adecuados para poner tiendas de campaña, ya que subir y bajar en un solo día es más complicado y cansado.
Fue un desafío para mí llegar hasta las ruinas, pero los aprendizajes al caminar, las vistas, el contacto con la naturaleza y la satisfacción de un logro alcanzado hicieron que valiera la pena.
Vista desde la cima del Monte Tláloc:
Ubicación en Google Maps: https://goo.gl/maps/DyxVE9rsueGpFUS59
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